Varias amigas influencers habían sido tentadas, pero no se animaron: fui yo quien finalmente se arriesgó a poner en marcha una firma de moda. Desde siempre me ha gustado mucho la moda y siempre me gusta estar atenta a las últimas tendencias. En mis redes suelo tener bastante éxito con mis atuendos y ya desde hace tiempo recibo muchas ofertas de otras firmas para posar con su ropa. Aunque sé que hay mucho desconocimiento sobre el trabajo que hay detrás del manejo de las redes sociales cuando tienes muchos seguidores, yo me lo tomo con filosofía: para mí no es solo un hobby, me lo tomo con responsabilidad: como cualquier otro trabajo.
Pero dar el salto hacia ser la imagen de tu propia firma requiere aún más trabajo: y ya no podía hacerlo todo sola, por eso empecé a buscar una persona que se encargara de gestionar mi imagen, una social media management, a poder ser también con conocimientos de moda. Empecé la criba y me llamó la atención una chica muy joven pero que ya había cursado un Master en Dirección Artística Madrid: tenía conocimientos tanto de comunicación como de moda: parecía el perfil ideal.
Hay que tener en cuenta que la firma de moda parte de un socio que me lo ofreció. Ahora mismo, no tengo capacidad, ni tiempo para llevar yo sola el proyecto. En principio, se tratará solo de ropa de baño: mi nombre aparecerá junto a los productos y yo los revisaré, pero no los diseñaré de cero: tan solo daré unas directrices. Y es que hay que ser humilde en esta vida: por mucho que me guste la moda no estoy en posición de ser una diseñadora sin tener la formación para ello. De momento, me conformo con ser consejera y modelo.
Pero lo que sí es importante es la forma en la que voy presentar el proyecto tanto en la web como en redes. Mi socio solo se encarga de la fabricación de las prendas por lo que mi social media management se tendrá que encargar de vincular mi trayectoria en redes con la nueva firma de moda. Con su Master en Dirección Artística Madrid estoy convencida que será capaz de dar un impulso a mi carrera.