Seguro que has escuchado a muchos hombres decir eso de que mi padre ya era calvo joven, mi abuelo ya era calvo joven y a mí me tocará también perder el pelo. Incluso puede que tú mismo lo estés pensando y te estrese la idea de perder tu cabello a temprana edad, porque afectará a tu imagen y te hará parecer mayor. Y no, no importa lo mucho que parezcan estar de moda los hombres con la cabeza afeitada, no es lo mismo hacerlo por elección que porque no hay remedio.
Si es el caso, te alegrará saber que no tienes que resignarte a ser calvo por el hecho de que la alopecia está en tus genes. Hay alternativas para que puedas lucir una cabellera frondosa durante mucho tiempo, incluso durante toda tu vida.
El primer paso es acudir a un especialista dermatologo alopecia nada más notar que el cabello comienza a caer o incluso antes si tu pelo es ralo y tienes antecedentes de alopecia. El especialista podrá ayudarte con tratamientos de diferente tipo para que tu pelo aguante en su lugar durante muchos años.
El pelo no se cae de un día para otro, sino que la caída es gradual. Es cierto que, aunque se pueda retrasar esta pérdida, al final ocurrirá si es lo que está determinado en la genética. Pero no quiere decir que tengamos que resignarnos. Existen los implantes de cabello y estos son cada vez mejores, más económicos y naturales.
Para los implantes de cabello hay dos posturas. Una es la de los hombres que dejan que caiga gran parte de su cabello y luego se realizan el implante. Esto supone desembolsar más dinero, pero seguramente, una sola vez. Pero otros prefieren ir poco a poco, para que la intervención resulte mucho más discreta y también más económica de cada vez.
Cuando ven que comienzan a perder espesor en el cabello, comienzan a realizarse implantes para que esto no sea así y recuperar una mayor densidad de pelo. El cabello injertado no se cae, pero sí se irá perdiendo el propio, por lo que con el paso de los años habrá que realizar nuevos injertos para ir supliendo el cabello que se pierde. Esto puede hacerse en las veces que se desee y resulta muy discreto, ya que no supone un cambio tan drástico, sino que es algo gradual y poco apreciable de cada vez, pero que permite mantener siempre el pelo.