El otro día me contaba uno de mis amigos que uno de sus familiares más cercanos estaba enfermo de cáncer de esófago, pero lo que también me dijo es que se lo habían detectado bastante pronto y que había muchas posibilidades de que se curase definitivamente. Eso me alegró mucho, por una parte porque no le deseo ningún mal a mi amigo y por otra porque también conozco a su familiar y me cae muy bien.
Pero antes tiene que pasar por el cancer de esofago tratamiento que no creo que sea demasiado agradable, porque supongo que tendrá que pasar o por un tratamiento de quimioterapia o por un tratamiento de radioterapia. Y ninguno de esos tratamientos son agradables para el que sufre el cáncer, y eso lo sé de forma bastante cercana por lo que sé de lo que hablo.
Espero que todo le vaya bien y que no se tuerza nada, porque no quiero que mi amigo tenga que despedirse de su familiar de forma prematura, y no queremos tener que ir a un funeral de una persona tan joven, ya tenemos que ir a suficientes funerales a lo largo de nuestra vida de personas mayores como para tener que ir a funerales de gente joven. Por desgracia ya he tenido que ir a unos cuantos funerales de algunos amigos que se han muerto y son demasiado tristes, porque casi todos los asistentes al funeral son personas jóvenes que deberían de estar haciendo cualquier otra cosa menos estar en un funeral de un amigo cercano. Pero gracias a dios eso no sucede tan a menudo, y por fortuna nuestro grupo de amigos cuidamos bastante los unos de los otros para intentar que no nos sucedan cosas de este estilo.
Ya que me ha tocado un cáncer de forma bastante cercana por lo que espero no tener mala suerte y tener la fortuna de que no me toque por segunda vez. Para eso es mejor no pensar en cosas malas, lo malo no debería de tener cabida en nuestras mentes. Pero no podemos evitar pensar en esas cosas horrorosas.