Sin fondo de armario

La mayoría de los padres suelen llenar de ropa a su primer hijo. Casi siempre se compra más de lo que se necesita y un montón de ropa acaba siendo regalada o, lo que es peor, en el cubo de la basura. Pero nosotros decidimos que trataríamos de ser cabales a la hora de gastar dinero en ropa, y más teniendo en cuenta la cantidad de regalos que recibiría el niño de familiares y amigos.

Pero como en esta vida nada en exceso es bueno, ni siquiera la parquedad, hace unas semanas nos encontramos con un armario semivacío. El niño ha crecido un montón, la gente ha reducido sus regalos y nosotros mantuvimos nuestra extrema moderación a la hora de comprar. Si el niño supiera hablar bien nos preguntaría: “¿qué vamos a ser los más ricos del cementerio?”

No es que seamos millonarios, pero ha llegado el momento de aparcar un poco nuestra frugalidad económica y mirar un poco de ropa para el pobre niño. Lo primero, consultar internet. Aprovechando que estamos de rebajas, puedes encontrar ropa buena a precio competitivo sin moverte de casa. Hemos visto, por ejemplo, ofertas Polos Polo para niños que nos vienen muy bien.

Hasta ahora yo tampoco había mostrado mucho interés en el tipo de ropa que debía poner el niño. Como va a la guardería, durante la semana viste el uniforme que no es que sea lo más estético del mundo, pero nos evita tener que vestirle todos los días. Y cuando llega el fin de semana, le poníamos lo primero que veíamos.

Pero el chaval se va haciendo mayorcito y hay que empezar a mirar qué tipo de estilo queremos que lleve, o al menos, qué cosas que no queremos que ponga. Aunque ni mi mujer ni yo somos mucho de vestir de firma, la calidad de la ropa de niño difiere bastante entre unas marcas y otras: los niños le dan mucho uso a todo y cuando una prenda es mala, rompe a las primeras de cambio. Por eso las ofertas Polos Polo para niños nos interesa: buen precio y ropa de calidad.